Cuando pensamos en nuestros antepasados, difícilmente los imaginamos divirtiéndose y teniendo fiestas inolvidables.
Las fotos en blanco y negro y libros de texto pintan una imagen de la vida en el pasado como monótona y seca, con pocos momentos para disfrutar y festejar. Métete un poco a profundo a la historia y encontrarás que nuestros antepasados también tenían fiestas – y quizá hasta mejores que las nuestras.
Los primeros juegos en el Coliseo
A parte de graduaciones, cumpleaños, y logros profesionales, inaugurar algo es una razón excelente para tener una fiesta. Los romanos se tomaron esto muy en serio cuando se terminó la construcción del Coliseo. Los libros de historia dicen que el festejó duró más de 3 meses.
Inauguración presidencial de Andrew Jackson
Andrew Jackson, el séptimo presidente de los Estados Unidos, tomó la oficina en 1829. Decidió celebrar su inauguración presidencial con una fiesta en la Casa Blanca. Más de 20,000 personas asistieron al evento.
Día de la Victoria en Rusia
El final de la Segunda Guerra Mundial se conmemoró alrededor del mundo, desde los Estados Unidos hasta Rusia. Uno se espera el típico festejo en la calle y saqueo de tiendas, pero en Rusia, la fiesta se salió de control. Miles de personas salieron a las calles en Moscú a celebrar la victoria de los aliados. Cuando el gobierno finalmente les llamó la atención casi 24 horas después, todo el alcohol en Moscú se había acabado.